Si llevas tiempo por aquí y me conoces, sabrás que soy promotora de jugar con los niños/as como actividad muy importante para su desarrollo. Es importante que dejes espacios de juego libre y espontáneo, pero también que juegues con tu hijo/a cada día.
Es muy beneficioso para el desarrollo de tu hijo/a y de su lenguaje que juegues con él/ella cada día, pero esto es especialmente importante si:
(Si estás leyendo este artículo y tienes un bebé de estas edades, puedes saltarte este fragmento. Ve directamente a “En el artículo de hoy encontrarás”).
Pero quizás has llegado aquí y tu hijo/a ya tiene más de 1 año y medio y…
- Está tardando más de lo que esperabas en hablar, todavía no dice sus primeras palabras y ya tiene 20 meses, 2 años, 2 años y medio.
- Su evolución es lenta, todavía dice muy pocas palabras, sobre todo se comunica con gestos y vocalizaciones.
- Usa una jerga, parece que quiera hablar, pero no se entiende nada de lo que dice, no dice palabras reales.
- Sí que habla pero parece que le cuesta mucho pronunciar las palabras y te cuesta mucho entenderle.
Este artículo también te servirá porque los materiales, objetos, juegos y actividades que voy a compartir contigo son también aptos para niños/as más mayores. Especialmente si estás aquí porque estás preocupada por las situaciones que acabo de mencionar.
Si te encuentras en una de estas situaciones, te invito a contactar conmigo porque mi Método Natural de Lenguaje – Logopedia Online es lo que necesitas para que tu hijo/a pase al siguiente nivel y empiece a soltarse a hablar, a decir sus primeras palabras, a expresarse mejor, articular mejor y hacerse entender mejor con palabras.
Con mi Método Natural de Lenguaje te ayudo a comprender por qué tu hijo/a se está comunicando como lo hace, por qué no está hablando todavía o tan poco, por qué su habla es tan ininteligible y, lo más importante, aprendes todo lo que puedes hacer tú para favorecer este lenguaje desde vuestra casa.
Consúltame sin compromiso Método Natural de Lenguaje – Logopedia Online.
¿Y qué cosas de las que haces en casa se pueden usar para favorecer el lenguaje de tu hijo/a?
Pues todas las actividades cotidianas, del día a día. Pero con especial atención, los momentos de juego.
Por eso, lo primero que te diría si no lo estás haciendo ya es que reserves cada día un ratito para jugar con tu hijo/a…
…y puedas disfrutar de esa actividad para poder poner en práctica toda una serie de actitudes y estrategias que impulsan el desarrollo global de tu hijo/a y, en particular, el desarrollo de su lenguaje.
Sobre los beneficios de jugar con tu hijo/a ya te hablé en este artículo en el que encuentras mucha información sobre por qué el juego es tan favorecedor para el desarrollo del lenguaje, citas inspiradoras de especialistas en desarrollo infantil, cómo jugar con tu hijo/a usando alguna técnica y estrategias de éxito y algunas ideas de materiales, objetos y juguetes que según Soprano (médica especialista en Neuropsicología del Desarrollo) son los que más potencial tienen para hacer que tu hijo/a hable.
En el artículo de hoy encontrarás
- Una lista extensa de cuáles son los materiales, objetos y juguetes para un bebé de 6 meses a 1 año y medio
- Qué puedes esperar que tu hijo/a haga con esos materiales o juegos
- Y qué puedes hacer tú para favorecer la interacción y el lenguaje
- Nuestros juegos y materiales favoritos cuando nuestro hijo tenía entre 6 y 18 meses
Parte de la información que brindo aquí para los puntos 1, 2 y 3 está inspirada en el Cuestionario de Juego de L. Espejo, M. Krefft y M. Valdivieso.
1) Materiales, objetos, juguetes y tipo de juego adecuados para tu bebé de 6 meses a 1 año y medio
Con todo lo que iré compartiendo, puedes ir haciendo una reflexión, para poder analizar en qué nivel, estadio o momento del desarrollo se encuentra tu hijo/a. Puedes ir anotando en un papel sobre cada una de las actividades si tu hijo/a “sí lo hace”, “con ayuda”, “empieza a hacerlo” o “todavía no”.
- Jugar sin elementos, solo con el cuerpo, en el suelo, promover su movimiento libre en el espacio.
- Elementos en el espacio como colchonetas, rampitas, sillones, escaleritas, un carrito…
- En estas edades, tu bebé lo lleva todo a la boca. Es su manera de explorar y conocer el mundo, su entorno, así que los objetos que debes poner a su alcance deben ser aptos para llevar a la boca (piezas grandes de construcción, muñecos de goma, cuentos de tapas duras, de tela y de plástico).
- Sonajeros y materiales que hagan ruido, campanitas, muñequitos con ruido, libritos con texturas que hacen ruido…
- Instrumentos de percusión: maracas, panderetas, tambores, caja china, xilófono, bongos, castañuelas…
- Pelotas de distintos tamaños y materiales.
- Materiales blandos, peluches, esponjas, telas…
- Juegos de cocinitas, animales, muñequitos…
- Juegos de construcción con piezas grandes: encajables y no encajables.
- Cuentos de tela, de tapa dura, de plástico… y que tienen diferentes texturas para tocar, también pestañitas para abrir pero grandes, muy visibles.
- Papeles de todas medidas y colores (especialmente grandes, para ponerlo en el suelo) y lápices, colores, ceras, pinturas de dedo.
- Vehículos tamaño grande, mediano, de materiales más agradables como la madera. También vías de trenes y vías. Objetos que tengan rudas.
Todos estos juguetes y materiales favorecerán que tu bebé se desarrolle pues tendrá oportunidades para experimentar y
- Jugar en distintas posiciones, en el suelo estirado, sentado, arrodillado, levantándose y agachándose… desarrollo motriz, esencial para el desarrollo global.
- Moverse por distintos lugares, reptar, gatear, trepar, caminar con o sin ayuda de los objetos ofrecidos, muebles…
- Explorar su cuerpo y los objetos, para conocer y comprender el mundo, su entorno y él/ella mismo.
- Lanzar y recibir, patear… con las pelotas
- Tomar objetos con la mano.
- Empezar a desarrollar el juego simbólico.
- Imitar los gestos de la vida cotidiana al jugar a cocinitas, muñequitos…
- Empezar a manipular objetos de una manera más precisa, como los lápices y colores, para ir trabajando su motricidad fina.
- Empezar a ser capaz de poner su atención en un cuento y mostrar interés por las imágenes y las historias.
2) Esto es lo que puedes esperar que tu hijo/a haga o empiece a hacer:
- Se mantiene en el juego de 3 a 20 minutos
- Responde a «actitud de juego» del adulto (se ríe cuando le sonríen o hablan directamente, al bailar, cosquillas, masajes, etc.)
- Intenta iniciar el juego solo o invita al adulto a jugar
- Explora los objetos, los toma, lleva a la boca, mira, golpea
- Mira el objeto que el adulto le indica
- Toma el objeto que el adulto le ofrece y ambos juegan juntos
- Logra seguir objetos con la mirada y girando la cabeza
- Busca objetos que se esconden frente a él (tapados, en una caja, etc.)
- Realiza movimientos de cara y boca, sonrisas, gestos, etc
- Intenta imitar los sonidos y entonaciones del adulto, mientras conversan con él
- Utiliza en el juego objetos reales que usa comúnmente, en su cuerpo, en el de mamá/papá o en los muñecos (peine, chupete, cuchara, etc)
- Responde con balbuceos o sonidos cuando un adulto le habla (el adulto habla primero)
- Utiliza balbuceos o sonidos para solicitar un juguete que le llama la atención (el niño inicia la conversación)
- Utiliza el índice para mostrar, apuntar, señalar
- Entiende las señales de inicio y final del juego
- Ayuda a ordenar los juguetes luego del juego
- Muestra dificultades, miedo o irritabilidad en juegos: De movimiento intenso / De cambios de posiciones / Con los distintos objetos y materiales
3) Lo que debes hacer tú, mamá/papá/cuidador, para favorecer la interacción, la comunicación y el lenguaje con y de tu niño/a
- Entender cuando el niño/a intenta comunicarse, solicitar atención o jugar.
- Usar actitud de juego cuando se relacionan con su hijo/a (mostrarle su cuerpo, moverlo repetidamente, cosquillas, bailar al ritmo de la música, está-no está, cantarle, etc.)
- Reconocer situaciones que al niño/a le desagradan en el juego
- Aceptar la iniciativa del niño/a para escoger con lo que quiere jugar y cómo, cuál es su interés
- Adaptar tu lenguaje verbal y no verbal para que este sea adecuado para el nivel del niño/a
- Agregar lenguaje y experiencia a lo que el niño/a va haciendo, mostrando, espresando
- Marcar verbalizando las etapas del juego (inicio, desarrollo, fin)
- Definir y respetar los turnos del juego, logrando que el niño/a comience a entenderlo y a participar en él, que van relacionados con los turnos en la conversación (ahora habla el niño/a, ahora habla mamá/papá)
- Mantener ordenado el espacio físico y los juguetes donde el niño pasa gran parte del día
- Presentar un tipo de juguetes por vez
- Guiar al niño/a para que se mantenga en el juego
- Permitir al niño/a ratos de juego libre (el niño juega solo o invita a jugar al adulto)
Cuidado con el exceso de elementos
Como acabo de decir, es importante que pongas al alcance del niño/a pocos elementos cada vez. Demasiados elementos proporcionan exceso de estímulo y que el niño/a no pueda disfrutar pues tiene demasiado para escoger. Haz que los espacios sean cómodos, diáfanos y sin exceso de objetos. En relación a este tema del exceso de juguetes y sobreestimulación puedes leer más en este artículo: “Regala presencia: regalos y sobreestimulación”.
También referente al propio juego. Cuando el niño/a es muy pequeño, es bueno proporcionar solo una cantidad pequeña de objetos del juego. Si jugamos con piezas de construcción, no las sacamos todas, solo algunas. Lo mismo con otros juegos, solo proporcionamos unos pocos animales, unos pocos platitos y comiditas, unos pocos muñequitos, unos pocos instrumentos… y vamos proporcionando más a medida que vemos que el niño es capaz de manejar más objetos a la vez.
También, es bueno tener los juguetes organizados y bien guardados. Que estén al alcance solo algunos, el resto guardados. Se puede ir haciendo rotación de juguetes que significa que vamos cambiando los juguetes que hay al alcance cada cierto tiempo y los demás están guardados.
Cuando proporcionamos un juego, un material, ponemos palabras, decimos que vamos a jugar a eso y, si el niño/a no tiene mucha atención y en seguida “se cansa” podemos hacer dos cosas. Una, invitar a jugar un poco más, porque nosotras también estamos jugando y nos estamos divirtiendo, y lo verbalizamos. Dos, seguimos esa iniciativa de nuestro hijo/a de terminar la actividad que estábamos haciendo y lo verbalizamos: decimos que ya hemos terminado ese juego. Así las actividades, acciones, juegos tienen un principio y un fin. Esto ayuda al niño/a a comprender, anticipar y organizarse.
4) Nuestros juegos y materiales favoritos cuando nuestro hijo tenía entre 6 y 18 meses
Ahora te comparto algunos de los juegos que nosotros hacíamos y que nos encantaban. Los materiales y objetos concretos que te comparto son verdaderamente los que nosotros teníamos o muy parecidos, por eso pongo algunas marcas específicas. Por supuesto hay muchísimas marcas y fabricantes; tú escoge lo que más se adapte a tus valores y tus gustos.
Nota: Algunos productos llevan enlaces de afiliados. Si los compras por ahí yo me llevo una comisión. De todas maneras, siempre recomiendo, si se puede, comprar en comercio local o hacer uso de la segunda mano e intercambios.
- Telas de colores, que no tuve ni que comprar, si no que busqué algunos pañuelos que tenía, muy finitos y de colores vistosos (como puedes ver en la foto). Por supuesto con actividades con telas estate siempre al lado de tu bebé porque puede ser peligroso si se le queda encima de la cara.
- Pelotas de diferentes tamaños y materiales. Nuestra preferida, la blandita con cascabel dentro. También de goma, grande de playa, con rugosidad por fuera…
- Instrumentos sencillos como maracas y sonajeros, con cascabeles. También de percusión como tambores y panderetas. También sirven otros juguetes, como bloques, botes y cajas, que pueden ser usados para percusión. Ten cuidado también de no dejarle solo con estos instrumentos si tienen piezas un poco móviles, porque los cascabeles se pueden desprender y tu bebé va a estar poniéndoselo todo en la boca.
Una amiga nos regaló estos sonajeros de muñecas y pies. Unas pulseritas con muñequitos con campanilla y texturas y calcetines con muñequitos también. Se los poníamos un rato y le gustaban mucho. Pero fíjate que no se ponga demasiado nervioso/a ya que él/ella no se lo puede quitar y a lo mejor le agobia un poco.
Apunte inciso sobre lo de ponerse las cosas en la boca.
“La necesidad de examinarlo todo con lengua y labios persiste en muchos bebés hasta la infancia (aproximadamente los 2 años).
No es solo natural y necesario, sino que es un deber de los adultos no restringirlo.
De hecho, que el niño se lleve objetos a la boca es un comportamiento indispensable para que, más adelante, tenga un desarrollo lingüístico adecuado.
Una opinión similar tiene Carolina Molina, psicóloga especialista en clínica y desarrollo infantil y directora de Mentalizarte, quien asegura que los pequeños que viven esta etapa de manera adecuada pronunciarán mejor las palabras.”1
Los especialistas afirman que llevarse las manitas y objetos a la boca es indispensable para que logre desarrollarse adecuadamente en el ámbito lingüístico, pues es una opción para estimular el habla a través de balbuceos o sonidos.
Por eso, deja que tu bebé, tu hijo/a pequeño, explore los objetos con la boca, pero que estos sean adecuados a su edad, que sean grandes para que no se los pueda tragar y estando tú siempre a su lado para vigilar su seguridad.
Déjale que se meta los cuentos en la boca, cuentos que también serán adecuados a su edad y nivel de desarrollo, de páginas duras de cartón, de tela, de plástico…
- Títeres de mano o de dedo. Se pueden contar historias, cantar canciones, ponerles voces a los títeres, esconderos y hacerlos aparecer…
- Poner música y bailar con el bebé, abrazaditos, cantando, siguiendo la música, el ritmo, potenciando nuestra gestualización, nuestras expresiones faciales.
Para más información sobre la importancia de la música en el desarrollo del lenguaje puedes leer mi artículo “Disfruta de la música con tu hijo/a a la vez que favoreces su lenguaje y aprendizaje”.
- Concretamente papá le hizo un regalo precioso a nuestro peque: unos CD de versiones de grupos que nos encantan. Rockabye Baby, canciones de cuna versiones de grupos famosos de rock que combinan el sonido de xilófonos y otros instrumentos de pequeña percusión con algunas arpas y campanas y con sonidos de la naturaleza, como agua cayendo, pájaros o grillos. El CD viene acompañado de un pequeño cuadernillo para poner el nombre del bebé, su fecha de nacimiento, sus primeras canciones… Nuestros Rockabye Baby eran versiones de Pixies y de Blur.
- Si está en la medida de tus posibilidades, te recomiendo mucho que asistas a música para bebés y familias. Nosotros disfrutamos durante varios meses de la música con bebés en Somriure, centro de crianza respetuosa de Barcelona. En esas clases, además de disfrutar mucho y aprender cómo la música, el ritmo, el movimiento, es tan importante para el desarrollo del bebé, me daba ideas para luego hacerlo yo en casa. Además que conocí algunas artistas que hacen música para niños/as que pudimos escuchar en casa. Nosotros escuchábamos mucho a Dàmaris Gelabert.
Especialmente para estas edades tan tempranas recomiendo (en catalán) el “Jocs de Falda”, “Tot sona!” y “Massatge amb cançons” de Dàmaris Gelabert.
- Observar la naturaleza. Estar al aire libre y mirar las flores, los árboles, escuchar los sonidos de los pájaros, las cigarras, el aire, las hojas… Ver animales en parques, como patos, cisnes, palomas, ardillas, gusanos, abejas, mariposas…
Nosotros pasábamos cada día mucho tiempo al aire libre. Creo firmemente en la importancia de la naturaleza para un buen desarrollo. En mi artículo “La importancia de la naturaleza y las consecuencias de estar privados de ella” lo cuento con todo detalle.
- Experimentar con materiales de la naturaleza o alimentos: hojas, ramas y palitos, piedras, harina, arroz, lentejas secas…
- Muñecos blanditos de todo tipo. También le regalaron una guitarra de tela blandita que le encantaba tocar, apretar, meterse en la boca, abrazar… Y nosotros hacíamos ver que era un instrumento más.
- Jugar con bloques. Empezar por solo tres bloques, de diferentes tamaños o iguales y armar una torre. Ir introduciendo cada vez más bloques. También bloques de colores y tamaños para hacer diferentes construcciones.
- Observar cosas con dibujos llamativos. Por ejemplo nosotros teníamos una mantita preciosa que nos regalaron que era un fondo marino muy vistoso, con colores vivos. Nos servía para mirar y comentar sobre lo que nuestro hijo veía y señalaba. Cualquier cosa con imágenes que llamen la atención, un cuadro, un póster, cuentos con imágenes…
- Jugar con muñecos bebés, para cuidarlos, darles de comer… imitar actividades cotidianas es muy importante porque conecta completamente con el niño/a. Al jugar con muñecos bebés estamos imitando lo que hacemos en la realidad con nuestro hijo/a bebé.
Pareja de bebés Nines d’Onil. Nosotros tenemos el niño, que de verdad era muy igual a nuestro peque. De todas maneras, si no quieres perpetuar los estereotipos de género, te recomiendo que les cambies la ropa (porque van de azul y rosa).
- Jugar con cocinita, platitos, cubiertos, utensilio, alimentos de mentira… Podemos hacer ver que ponemos la mesa o lo podemos hacer en el suelo con un mantelito y somos nosotros quienes hacemos ver que comemos. O podemos implicar a sus muñecos, peluches y títeres.
Concretamente de cocinita teníamos utensilios y comida de plástico que nos regalaron. Pero cuando vimos que le gustaba tanto, compramos o pedimos como regalo a familiares y en Navidad, materiales bonitos de madera, como los que te muestro a continuación.
- Hacer bromas, añadir efectos sorpresa. Por ejemplo me puse unos calcetines que eran suyos pero solo me tapaban los dedos de los pies y le hizo mucha gracia.
- Jugar con cajas de cartón, de cualquier tamaño. Nosotros usamos la caja del cochecito que era muy grande para hacer una casita, con puerta y ventanas y que luego fuimos decorando con colores, pegatinas y recortes. Nos encantaba. Nuestro peque estaba siempre entrando y saliendo, jugábamos a vernos por la ventanita, a esconderse, a imaginar que era nuestra casa, que dormía, que preparaba la comida…
- Jugar a encajes sencillos, como de formas y colores. Empezar muy sencillo y aportando nuestra ayuda, porque al principio no les es fácil encajar las piezas correctamente. Empezar por círculos, cuadrados y triángulos y luego ir hacia otras formas como estrellas, corazones, pentágonos…
- Hacer rompezabezas muy sencillos. Empezar muy sencillo, con dos piezas que encajan. Ir añadiendo piezas, puzzles de 3, de 4, de 5 piezas… También esos encajes que son de madera y que las piezas tienen que encajar según la forma y tienen una clavija para poder agarrar bien.
- Cochecitos, vehículos. Tenemos una experiencia curiosa con los coches. En un principio ni papá ni yo queríamos potenciar que nuestro hijo fuera un niño «de coches» pues no nos gustan demasiado los coches (no tenemos coche, papá va en bici a todas partes -incluso teniendo 10 Km de ir y 10 Km de volver al trabajo cada día, llueva, haga viento o calor), nos preocupa el medioambiente… Sin embargo nuestro hijo mostró un interés muy fuerte hacia los vehículos.
En la calle, se fijaba en todos los vehículos: coches, motos, taxis, ambulancias, coches de policía, helicópteros… Y si íbamos a algún lugar a jugar donde había vehículos de juguetes le encantaban, las ruedas, hacerlos rodas, hacer onomatopeyas… Así que no luchamos más en contra de su amor natural por los vehículos y empezó a tener alguno.
Empezamos con vehículos de madera y muy significativos para él, como un autobús y taxi de Londres de madera (parecidos a los de la imagen).
Luego la abuela le regaló un coche de policía y coche de bomberos de madera desmontables (como el de la imagen). Estos coches tuvieron un éxito increíble, y cuando hijo ya tenía 6 años le regaló el policía a un amiguito y se convirtió en el juguete preferido de este.
También teníamos un tren de madera con las letras de su nombre (similar al de la imagen).
- Proporcionar desde bien pequeño papeles, colores, lápices para que pueda ir experimentando con su trazo. No tener ninguna expectativa, solo que sea un rato divertido. Mejor proporcionar papeles grandes donde pueda tener más superficie. Invitar a otros tipos de materiales, como pinturas, pinturas de dedo, con pinceles, esponjas… sabiendo que a muchos niños/as les cuesta empezar a usar estos materiales, porque a muchos niños/as al principio les provoca cierto rechazo según qué texturas, temperaturas y olores. Así que de manera respetuosa invitar pero no forzar. Y poco a poco.
- Letras y números de madera y magnéticos. Puedes pensar que todavía es pronto para mostrar letras o números. Dependerá del interés de él(ella. En nuestro caso yo noté que a nuestro hijo, tal como era, le interesarían las letras y los números. Así que le proporcioné desde muy pequeño letras y números móviles. Pero seleccionadas por mí. No le daba todos los números y todas las letras, ni gran cantidad de ellas. Si no que empecé dándole el 1, el 2 y el 3. Más adelante llegamos al 5 y así progresivamente.
Con las letras, le proporcionaba las que serían significativas para él como su inicial (M, que también és la inicial del nombré de papá y la M de mamá), la D (de daddy, su papá), la I (la inicial del nombre de su tía)…
Teníamos letras de madera para jugar en el suelo o en la mesita y también magnéticos, los poníamos en la nevera. Mientras yo estaba en la cocina él estaba conmigo poniendo letras y números en la nevera y hablábamos sobre ello. Desde bien pequeño íbamos ya diciendo palabras que empezaran con alguna de estas letras y la capacidad que tenía para hacer esto era sorprendente. Ahí que nuestro hijo aprendió a leer «solo» a los tres años. Tengo un artículo en proceso sobre este tema.
- Jugar con plastelina por el simple hecho de experimentar, tocar, moldear, romper, volver a amasar… Por ejemplo esta plastelina Giotto Bebé que es dermatológicamente testada y no ensucia. Viene con moldes y accesorios.
- Mirar cuentos desde bien pequeños, cuentos adaptados a su edad, nivel e interés. Nosotros empezamos con el cuento de Sometimes de Emma Dodd del que tanto hablo. También teníamos cuentos de tela que llevábamos con nosotros de paseo, en el cochecito. Están bien los cuentos de plástico. Cuentos de tapa dura que ellos/as mismos puedan manipular y llevar a la boca (como hablaba antes).
Si quieres saber más y necesitas más ayuda
Espero que este artículo te haya sido muy útil y que tengas más ideas de POR QUÉ, A QUÉ y CÓMO jugar con tu bebé de 6 meses a 1 año y medio.
Espero tus comentarios. ¿A qué le gusta jugar a tu peque?
Y recuerda: tu hijo/a…
- Está tardando más de lo que esperabas en hablar, todavía no dice sus primeras palabras y ya tiene 20 meses, 2 años, 2 años y medio.
- Su evolución es lenta, todavía dice muy pocas palabras, sobre todo se comunica con gestos y vocalizaciones.
- Usa una jerga, parece que quiera hablar, pero no se entiende nada de lo que dice, no dice palabras reales.
- Sí que habla pero parece que le cuesta mucho pronunciar las palabras y te cuesta mucho entenderle.
… te quiero ayudar a tomar acción para impulsar su lenguaje desde casa: por favor, mira las opciones de servicios que tengo para ti.
Si todavía no me conoces demasiado, te recomiendo que leas más artículos del blog y veas esta selección de talleres que he hecho para ti.
Artículos relacionados, otras edades:
- 18 – 36 meses (3 años): Juegos y materiales imprescindibles que favorecen el lenguaje de tu hijo/a de 18 a 36 meses
- 3 – 5 años: Actividades para peques de 3 a 5 años que desarrollan el lenguaje y su aprendizaje de manera natural
Referencias en el artículo:
1“¿Por qué se llevan todo a la boca?”, en elabecedelbebe.com.
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